Había un mundo donde los hombres se callaban.
Se callaban porque
todo lo que decían no se encontraba en ningún sitio y, en su lugar, sólo veían desolación
y ausencia, bosques siempre renegridos y los despojos de un tiempo perdido.
Se callaban porque
decían que sí cuando en verdad dudaban y rodeaban la piel viva de la
incertidumbre con largos sonidos oscuros. Porque decían que no cuando lo cierto
era que temblaban y soñaban y sentían. Y porque decían y decían y decían y no
había nadie, ninguno, del otro lado.
Se callaban porque transformaron
las grandes palabras en bocas partidas y perdieron de vista hasta secar las más
pequeñas, las palabras dichas por primera vez, las palabras-sílabas.
Se callaban porque al
decirse ya no se miraban. Se regodeaban, se ensalzaban, se engrandecían, se
aniquilaban.
(Fotografía: Iván Castiblanco Ramirez). |
En el mundo de los hombres
que se callaban, las mañanas comenzaban con gestos limpios. Las tardes no precisaban
sonidos ajenos. Y por la noche, en vez de hablar, escuchaban.
Escuchaban a los niños que sí
hablaban. Escuchaban a las mujeres que sí hablaban. Escuchaban la tierra que sí
hablaba.
Y se detenían. Se daban
cuenta que escuchar era más largo que hablar, más hondo, más claro. Percibían con asombro cuánto el mundo era más interesante que ellos mismos.
Por fin, regresaban a la vida a la que habían perdido porque sólo invocaban su nombre sin pronunciarla. Volvían a la vida a la que habían fatigado por tantas declinaciones sin motivo.
Los hombres se callaron y,
así, descubrieron la humedad, el deseo, la abertura de los párpados.
Y, también, por acaso o por asombro, descubrieron la escritura.
...Por fin , regresaban a la vida a la que habían perdido porque sólo invocaban su nombre, sin pronunciarla...
ResponderEliminar...Me quedo aquí, ...pensando , pues estas palabras, movilizan mi alma...
( me enamoran..)
LAU
Te refieres a los hombres como género masculino o bien como genérico de hombres y mujeres?.
ResponderEliminarIsabel Tapia